Capítulo 60

miércoles, 21 de octubre de 2009

No pasaba una semana sin que Rito me preguntara cómo iba en la escuela o qué iba a estudiar. Yo siempre le daba largas, no me gustaba que me preguntara de eso. Aunque él siempre insistía.

-¿Qué vas a estudiar Lover?
-Pues... nada, yo creo que termino la prepa y ya.
-¿Cómo que la prepa y ya? no seas pendejo Lover, ¿luego que no quieres ser licenciado?
-Pa' robar no se estudia.
-Lover, ¿cuántas veces le he dicho que uste' no es como nosotros? nosotros somos pelados, tú no.
-Y yo siempre te he dicho que somos de donde mismo, del 14.
-Mira Lover, no le hagamos al loco. Todos sabemos que tú eres diferente. Sí, eres del barrio, pero porque aquí te puso la vida, no porque seas de aquí.
-¿Qué pasó Rito, estas diciendo que no soy catorceavo?
-No no no, no es eso. Uno es bruto pa' hablar. ¿Cómo te explico? Tú tienes pedigrí, tú vienes de otra cuna. Uno hace esto porque no sabe hacer otra cosa, pero tú eres inteligente. Aprovéchalo.
-Rito, tú eres inteligente. ¿Quién es el que mueve al barrio en verdad? pos' tú mero.
-No Lover, no me entiendes. Esas son pendejadas. Eso es colmillo, maña. Tu tienes "eso" que a leguas se mira. Te propongo un trato.
-A ver.
-Hazte licenciado y yo te "apadrino".

Cuando uno entra en el bajo mundo, ser "apadrinado" por un "grande" era el sueño de cualquier malandrín. Parte del respeto del "padrino" se pasaba por herencia al "ahijado", Rito jamás había "apadrinado" a nadie. Era la mejor oferta del barrio. Muchos habrían deseado entrar a trabajar con Rito de esa manera. Las oportunidades sólo se dan una vez en la vida, esta era una de ellas, yo debía tomarla.

-No ps, va a estar cabrón Rito. Pero que se arme
-¿Luego?
-Se necesita mucho puntaje, y por el promedio de la prepa no hay cuete, estoy en el comité, el pedo esta en el examen de admisión.
-Eso es lo de menos Lover, yo conozco a gente que me debe algunos favores. Entonces ¿estamos?
-Pos ta' bueno.
-Ya está mi Lover, mañana vamos a hacer esos papeleos.

Fuimos a ver como sería el bisne. Rito me ubicó de volada con unos cacas grandes de la universidad.

-¿A qué quieres entrar?
-Licenciado.
-¿Pero en qué?
-Ps... de leyes.
-¿Licenciado en Derecho?
-Pos' eso de abogado.
-Sí, sí, en Derecho.
-Pos eso.
-¿Qué pasó Rito, a este lo trajiste pa' que te haga el paro o qué?
-No, ps' pa' que le eche ganas el chavo.
-Jajaja, que cosas... pero bueno, así hacen sus "negocios" y ya saben a lo que le tiran.
-No güero, el chavo no anda en nuestros negocios.
-¿Ah no? ¿Y entonces porqué lo trajiste?
-Oh que la canción, uno no puede hacer una ayuda porque de volada ya piensan mal.

Los dos se quedaron en silencio mirándose y soltaron una carcajada. El tipo tenía una risa muy peculiar, una risa de gordo muy chistosa.

-No te conociera Rito, jajajaja, mejor dile a la secre que se traiga el six, hace mucho que no te veía.
-Güero, mejor la chelas las dejamos para la otra.
-¿Me vas a despreciar Rito?
-Cómo crees Güero, nomás que se me hace que ahorita vas a estar ocupado.
-No para nada, no hay mucho que hacer. Bueno, todas esas pendejadas de papeleos pero les ponemos el sello de aceptado y ya con eso.
-Nombre, si vas a estar ocupado.
-Ah caray, ¿y porqué? ¿tú tienes mi agenda o qué?
-Pos' más o menos. Lover, traele el regalito que le trajimos.

Salí de la oficina y le dije a la Zaira que se pasara.

-¿Como ves güerito? Pura calida'...
-Pinchi Rito, jajaja, no pos' sí hay. Pero no te hubieras molestado hombre...
-Güero tu sabes que me gusta ser agradecido.
-Hombre Rito, pero no hacía falta.
-Como no Güero, así ya me siento más en confianza de pedirte otro favor.
-Jajaja pinchi Rito, tu no das paso sin guarache.
-Zaira, quiero que me atiendas bien al señor, quiero que lo dejes bien servido.
-Hombre Rito, se me hace que el chavo este va a entrar hasta en primer lugar, jajaja.

Y mientras cerrábamos la puerta, las regordetas manos del tipo rodearon la cintura de Zaira y la jaló para con él.

Meses después estaría yo pisando las aulas de la universidad, empezando la carrera de Licenciado en Derecho, aprendiendo todas las leyes. Todavía no sé si aquella decisión fue nomás porque quería hacerle un chiste negro a la vida.

Capítulo cincuenta y nueve

jueves, 8 de octubre de 2009

-Lover, ya va a ser mi fiesta de 15 años.
-¿A poco sí Laurita?
-Sí pues, para que vayas.
-Un gustazo ¿y que va a haber?¿vamos a cerrar la calle?
-Pues fiesta.
-¿Con vestidote y pastelote?
-No como crees, eso está muy aburrido... voy a rentar luz y sonido y pues eso.
-¿Pa' cuando?
-De este sábado al otro, para que vayas eh.
-Si pues, yo te voy a regalar unas botellas pa' tus amigos.
-Gracias Lover, ¡no vayas a faltar!
-Nombre Laurita, ahí mero me vas a tener.

Laurita era linda, era morenita, de pelo negro y lacio, ojos grandes color gris. Estaba delgadita, le faltaba de donde agarrar, pero todavía tenía tiempo para "crecer".

Cada que la veía me recordaba lo de su fiesta, y yo le decía que seguro iba, que yo no rajaba. "Órale pues Lover, espero que seas ley"

Luego un día llego un chavo y con una sonrisota de baboso me preguntó

-"¿Qué tranza mi Lover, sí va a ir a la fiesta de la Lau?"
-Si ps sí, ¿por?
-Ps... es que me mandó decir.
-¿Qué?
-Dice que quiere que le des su regalo.
-¡Ah chingao! ps si ya le dije que el sabado le llevo unas botellas.
-'Ira Lover, la Lau me mandó decir que quiere otro regalo.
-¿'Ora qué?
-Dice que se siente mal, que ya va a cumplir 15 y todavía está "nuevecita". Y pos...
-Jajaja, no chavo... ps que se busque uno de su edad.
-Ps dice que quiere que tu la "estrenes". Que la hagas mujercita.
-No tengo ganas de meterme en problemas ahorita... dile que todavía huela a MP
-¿MP?
-Ministerio Público.
-Chale Lover... como si les tuvieras miedo a esos weyes.
-Miedo no, pero ¿pa' que le busca uno?
-¿Tons no?
-No.

Ya con estos antecedentes me dieron menos ganas de ir a la fiesta. Nomás iría a hacer acto de presencia. Pa' que no dijeran.

El mero día de la fiesta, Laurita llegó con un vestido pegadito. Apenas si se notaban sus pequeños senos, parecían un mero doblez del vestido. El vestido se estiraba tan sólo un poco en la parte de sus caderas, sutilmente delineando su figura. Creo que lo mejor estaba donde terminaba el vestido, porque dejaba ver que tenía unas piernas bien torneadas y aunque flacas, no eran huesudas. Clara señal de que tenía pontencial, que algún día ese vestido se iba a rellenar perfectamente. Pero no hoy.

Le di su abrazo y le llevé las botellas que le había prometido.

-¿Y qué pensaste del otro regalo?
-No mija... como crees, mejor búscate a un chavo de tu edad.
-Están bien pendejos.
-Ps así aprenden juntos, chaparrita
-¿Entonces así me vas a dejar?
-No te amargues, mejor disfruta tu fiesta, deja me voy a echar un rol.
-Tú te la pierdes.

Y me di una vuelta por la fiesta. Aquello olía a hormonas, las sudaban. Bailé con varias, pero no amé a ninguna. Laurita no me despegaba la mirada, más con recelo que con otra cosa.

La música movía automáticamente los cuerpos, el humo de las máquinas creaba esa niebla cobarde, el olor de la mota adornaba el aire, las luces del estrobo cortaban la visión y todo parecía en cámara lenta. Después entre la niebla veías siluetas que se alejaban de una que parecía vomitar, pero no se escuchaba ni se olía.

Unas manos se metieron por debajo de mis brazos y abrazaron mi pecho. Voltee y era ella, ¿Bailamos? preguntó, las máquinas echaron más humo, las luces cambiaron de color violentamente y escondidos entre la niebla la agarré y le di un beso.

Ella trató de abrazarme en medio del beso, pero eso me molestaba pues no se trataba de amor, por lo que tomé sus brazos y los puse detrás suyo, mientras los míos se deslizaban primero por sus manos y luego por sus nalgas. Mi mano encontró el fin de su vestido, luego con una decisión absoluta se fue debajo de su vestido y también debajo de sus bragas. Agarré con fuerza. Había con qué trabajar.

"Te espero en la esquina" le dije al oído mientras se lo besaba, mordí su cuello y la solté. Yo me fui por otro lado.

Una vez en el punto de encuentro, rápidamente me la llevé al carro. Quizá pensó que la dejaría retomar el aliento, pero ese no era mi objetivo. Apenas se subió y la acomodé debajo mío. Con un poco de violencia le quité las bragas, pero se atoraron en sus tacones, no esperé y las rompí. Le subí el vestido hasta poder ver su ombligo. Besé su entrepierna un par de veces y luego lo hice con cuidado. Me dijo que dolía, le dije que sólo al principio. Fueron los únicos minutos que fui "tierno". Después aumenté el ritmo. Parecía que iba a llorar, así que mantuve la velocidad. Minutos más tarde, cuando al parecer el dolor se había convertido en placer, lo hice con más fuerza. Le gustó. Me gustó. Tan estrecho, tan húmedo.

Una vez que terminamos me quité de encima, eché los brazos detrás de mi cabeza e intenté alejarme lo más que podía de su cuerpo. Los vidrios empañados nos delataban. No había mucho tiempo para recuperarse, le bajé el vestido y le pase mis mano por su cabello como peinándola.

-Feliz cumpleaños
-Gracias...
-Laurita - le dije lo más neutral posible - espero que no te ofendas, pero...
-¿Qué?
-Esto fue sólo carne... no hay más.
-Lover... no importa, ya sabía, yo sólo quería que me rompieras el himen, no el corazón.

Si alguien se había quedado sin palabras ese era yo. Una chamaca de 15 años dándome una lección de frialdad. Esta nueva generación iba a 300 por hora.

Al día siguiente quité las fundas de los asientos. Me molestaba la sangre. Sí, ya iba preparado. Desde un principio estaba dispuesto, sólo fue que me quise hacer el exquisito.

Capítulo 58

jueves, 1 de octubre de 2009

¡Ya llegó Joaquín Llorabas! Disculpen ustedes el retraso de este último tiempo, pero aquí Marina no se pone las pilas para subir este cotorreo. Ya me pegó. Ya pues, tú ponle los acentos. En fin, capítulo 58.

-¡Lover! que dice el Adrián que vayas.
[...]
-¿Qué pasó Adrián? ¿qué me buscabas?
-Sí Lover, necesito que me hagan un trabajo.
-¿De qué?
-Te vas a ir con Pitus y con Juan.
-¿De qué va a ser el trabajo?
-¡Mucha pinche pregunta! le voy a pagar ¿qué no?
-Pero para mentalizarse.
-Mentalizarse mentalizarse... haz lo que te digo y que ellos te cuenten en el camino.
-¿Hay que llevar cuete?
-Sí.

-----

-Lover, acompáñame al Parián.
-¿Te vas a invitar las heladas mi Rito?
-Nombre, vamos pa' que tu me las invites.
-Tsss te digo.
-Jajaja, cabrón, cuando yo lo invite es porque yo pago.
-Así ps sí.

-----

Llegué y ya estaban esperándome Pitus y Juan. Juan, con cara de pocos amigos aun con resentimiento por lo de Yara. Nos subimos al carro, Pitus sería el chofer.

-¿Qué trajiste?
-La 38
-No chingues Lover, eres cabrón pero no tanto.
-¿Pos' luego pa' qué quiero más?
-¿No te dijo Adrián?
-No
-Puta madre.
-¿De qué se trata?
-Vamos a ir con el "Chaparro"
-¡No chingues! ¿lo vamos a quebrar?
-¿Le tienes miedo pinche Lover? - preguntó Juan con toda la malicia.
-No es eso, es que hasta cierto punto es compa. - le contesté yo.
-No ha pagado lo que debe, pero no lo vamos a quebrar - dijo Pitus.
-¿Entonces?
-Vamos a cobrarnos "a lo chino", no queremos violencia. Pero para eso tenemos que sacarles un buen susto. Trajimos las escopetas.
-Chingado.

----------

-¡Pelón, traeme dos estrellitas pero bien frías, de volada! - le dijo Rito al mesero - dicen que por ahí anda el Joaquín.
-¿Y ese wey quién es? - le pregunté.
-¿A poco no lo conoces?
-No ps no.
-Joaquín, "El cobarde".
-Me dejas igual Rito.
-¡Oh que la canción!, gracias, traete unas botanitas de una vez Pelón, te digo, entonces ¿a poco no has oído la historia? Joaquín Quijano...
-Tiene nombre de cantante jipi, de esos mugrosos que tocan trova.
-Jajaja, ¿y eso qué es?
-¿Jipi?
-No cabrón, jipis son los John Lenon y esos, lo de "trova"

------

Llegamos al resataurante a las 6 de la tarde. Lleno de gente, como temía. El valet parking se ofreció a meter el carro, le dijimos que no tardábamos. Ellos insistieron. Les dijimos que íbamos con el "Chaparro". Dejamos el carro ahí nomás.

En una mochila para gimnasio llevában las escopetas. Sin dudar caminamos hasta la oficina del Chaparro.

-¿Quién?
-Yo.
-Chingada madre, ya les he dicho que me encabrona que no digan su nombre pos' que son fantasm....
-Buenas Chaparrito, no te me pongas bravo - le dijo Pitus mientras lo empujaba para la dentro de la oficina.- Lover, quédate afuera, tu vente Juan.
-Chaparro, podemos hacer esto de la manera más difícil que quieras. - Sacaron las escopetas - Calibre 12, son más inseguras para quien las dispara, pero todavía más inseguras para quién recibe el disparo. Necesitamos el dinero pero de ya. Con 50% de interés.
-Cálmate Pitus...

Juan empuñó fuerte su escopeta y le apuntó justo en la cabeza

-¿Eres sordo o te gusta hacerle al pendejo? El Lover dice que yo soy medio pendejo, y a lo mejor es cierto y se me sale un pinche tiro. ¡El dinero!

-------------

-Ps la trova es una música bien jodida de esos weyes que se sienten poetas.
-Jajaja, esos cabrones, poetas.
-¿Y entonces? ¿Quién es ese tal Joaquín?
-Era un cabrón de la Vieja Guardia.
-¿Del 14?
-¿Pos' de 'onde más va a ser?
-Ps entonces va a haber fiesta por que llegó ¿no?
-Jajaja, ¿fiesta? si antes la cagó haciéndose presente. A ver si no lo chingan. Bueno no, ahorita la Vieja Guardia ya está retirada, no creo que le hagan nada, ya estan viejos todos para andarse con chingaderas y rencores.
-¡Ah chingao! ps pa' que uno de la Vieja Guardia haya sido mandado al diablo tuvo que haber hecho alguna pendejada.
-Pendejadota. Le apodaron "El cobarde del puñal"
-Como me gustan los apodos que ponían los de la Vieja Guardia.
-Maestros para eso de la vacilada y el albur. Bueno, realmente el apodo completo era "El cobarde del puñal de jade" ¡chíngate esa!
-Está muy poético eso.
-Eran unos poetas esos pinches viejos. Unos poetas.

---------

-Pitus calma al Juan, cálmalo, te pago pero no se le vaya a salir un tiro.
-Chaparro, ¿dónde está el dinero?
-Mañana sin falta Pitus, sin falta.

Pitus le pegó con la culata en el hombro, el Chaparró gritó del dolor.

-¿Dónde está?
-¡Mañana Pitus, mañana! ¡sin falta!
-¿Dónde chingados está el dinero? ¿Te gustan más los billetes que la vida verdad?
-¡Pitus, tú sabes que sí pago!
-Ya, queremos el dinero ya. - y le pegó de nuevo con la culata pero ahora en la mano que cubría el hombro herido.
-¡Ay! ya, está bien, está bien, esta bien.

Y se alejaron los tres hacia una puerta muy delagada de madera.

-Cuéntale
-Ese era trabajo de tu contador, me lo voy a llevar todo y lo cuento en mi casa.
-Pero...
-No te preocupes Chaparro, si hace falta dinero te haremos otra visita.
-Y si sobra.
-En este negocio el dinero nunca sobra.

------------

-De los de la Vieja Guardia, Joaquín Quijano fue el último en llegar al 14 , quizá por eso nunca encajó al 100%, pero todos tenían que reconocer que Joaquín era bravo para el bisne. Ese Joaquín era "malilla" y en este negocio siempre se necesita un "malilla". Eso sí, te puede salir el tiro por la culata con ese tipo de gente, que fue lo que pasó. Era pachuco el compa, bueno pal' baile, no tanto como Leoncio, pero se defendía. Apostador como él solo, su fuerte era los gallos. Es más, si le preguntas a los viejitos que se sientan ahí en el Parián todavía se acuerdan del Joaquín. Se trincaba mucho el compa y cuando perdía hacía sus desmadres.
-Ahh tons por eso le pusieron el cobarde... el que apuesta tiene que perder como hombrecito.
-No, déjate de eso.
-¿Tons?
-Mató a uno del barrio.
-¡Ah cabrón! ¿pedos de faldas?
-No fue ni por eso.

---------

-Espérate Pitus, hay que contarlo de volad.... ¡ay!
-¡Que te calles cabrón! ¡Cállate ya perro! - le gritaba Juan mientras le ponía una chinga con la escopeta.
-Ya estuvo Juan, ya estuvo.
-¡Que no se pase de verga no somos sus pendejos!
-¡Ya Juan! - le gritó el Pitus pero Juan lo seguía golpeando.

Me metí en chinga para tratar de quitarle a Juan de encima.

-¡No te pases de cabrón Juan, ya estuvo!.
-¡Se cree muy chingón este pinche chaparro!
-¡Bájale de huevos Juan! ¡No mames!
-¿¡También estas de lado de este pendejo pinche Lover!? ¿También? ¿Ya estuvo no cabrón? ¿Quieres pedo conmigo o qué cabroncito?
-¡No digas pendejadas Juan, ya vámonos!.
-Juan, ya estuvo wey, tenemos que pelarnos - Le dijo Pitus.

A paso veloz cruzamos el restaurante, escuchamos el grito de la secretaria y mejor corrimos. Unos cabrones nos salieron con pistola, seguridad privada o guardaespaldas, quién sabe. Pero para esto habían traído las escopetas. Les apuntaron con ellas y los tipos bajaron sus pistolas, seguimos el camino y nos subimos al carro.

-----

-Peor tantito, mató a uno de la Vieja Guardia.
-Uuuuuy, error.
-De esos grandes.
-¿Y cómo estuvo?
-Pos' resulta que...
-¡Rito! ¡qué milagro que te dejas ver! - una mujer ya entrada en años y carnes le gritó de lejos a Rito.
-¡Qué pasó Chayito! pero si por tí no pasan los años, estás igualita.
-Jajaja, como crees... ¡Lover! ¡buenas! veniste con este viejo a verle las nalgas a las chamacas...
-'Ombre pues Chayito no me estés quemando aquí con el chavo.
-Ni que no te conociera Rito, pero que gusto verte, fíjate que me había enterado que andabas por aquí pero no había tenido oportunida' de visitarte, y como tu tampoco visitas pues...
-Pos' no me invitas Chayito, la cosa está en que me invites y armamos la fiesta.
-Iba de pasadita Rito, tengo que ir a un mandado... pero échate la vuelta a mi changarro, sirve de que te doy una leída del horóscopo azteca.
-Pos si ya me lo leiste.
-No Rito, pero el azteca es diferente, ese se lee varias veces porque tiene varios "candados", date una vuelta y verás...
-Ta' bueno pues Chayito, que estés bien.
-Lover, nos vemos, ahi te echas una vuelta con Rito.
-Que le vaya bien Chayito.
-Pícale Lover, ya se me hizo tarde para llevar un encargo ¡Pelón! aquí te dejo la feria. Ahí luego te cuento la historia del Joaquín.
-------------

-Son mamadas Juan, son mamadas.
-Ya Lover.
-¿Cuáles mamadas? Asi se hacen los trabajos Lover, si te vas a pandear mejor no vengas.
-No me estoy pandeando pero el trabajo es directo, sin pendejadas. En lo que gritaba el pinche chaparro nos pudo haber caido la cuica.
-Eso si Juan.
-¿Pitus tú también te vas a poner de parte de este wey?
-No me estoy poniendo de parte de nadie, pero para eso llevamos las escopetas, para no hacerla de pedo tanto.
-Mamaste Juan...
-¡Ya estuvo bueno cabrón, párate Pitus, nos vamos a pegar en la madre!.
-A ver cabrones, no se que pedo traen entre ustedes pero los dos le van bajando de huevos,
-Ps este puto...
-Negocios son negocios Juan.
-Me vale madre, nos conocemos desde morros. Trabajamos juntos, vivimos en el mismo barrio. Déjense de chingaderas.